Este año se han cumplido sendos centenarios de los nacimientos de dos de las grandes emperatrices de la literatura española. Ana María Matute y Carmen Martín Gaite nacieron en 1925 y durante todos estos meses se les ha rendido homenaje por todo el país con multitud de actos, lecturas y reconocimientos. Compartieron además una profunda amistad y admiración mutua.

Ambas obtuvieron su reconocimiento en vida, pero también sufrieron los azotes del machismo en sus trayectorias literarias y personales. Ana María Matute, a pesar de ser una de las primeras mujeres en ingresar a la Real Academia Española (en 1986) y ganar el Premio Cervantes (en 2010), experimentó las dificultades impuestas por la sociedad patriarcal, especialmente durante la posguerra y la dictadura franquista.

Matute creó personajes femeninos fuertes y complejos, a menudo sufriendo las consecuencias de una sociedad patriarcal. Así, la infancia, la soledad, la injusticia y la búsqueda de identidad son temas recurrentes en su obra, a menudo con una perspectiva femenina. 

Nació en Barcelona el 26 de julio de 1925. Aunque estudió música y pintura, se decantó por la literatura. Comenzó a escribir cuentos desde niña y su primera novela, «Pequeño teatro», fue publicada en 1954, con la que obtuvo el Premio Planeta. «Los hijos muertos», la trilogía de «Los mercaderes», «Olvidadado rey Gudú» o «Paraíso inhabitado» son algunas de sus grandes obras.

Falleció en su ciudad natal el 25 de junio de 2014. Su obra ha sido traducida a numerosos idiomas y sigue siendo estudiada y disfrutada por lectores de todo el mundo. 

Por su parte, Carmen Martín Gaite, nació en Salamanca, se licenció en Filosofía y Letras y se integró en el círculo literario de la Generación del 55 en Madrid. Su obra, que explora temas como la incomunicación y la infancia, e incluye grandes obras como «Entre visillos» (Premio Nadal), «Nubosidad variable» o «El cuarto de atrás».

Como Ana María Matute, recibió numerosos reconocimientos de gran prestigio, incluyendo el Premio Nacional de Literatura y el Príncipe de Asturias de las Letras, en 1988.

Aunque nunca se definió como feminista, la escritora abordó en su obra el machismo y la limitaciones impuestas a las mujeres durante el franquismo, especialmente en su novela «Entre visillos». Su escritura reflejó la opresión social y las dificultades que enfrentaban las mujeres para realizarse personal y profesionalmente en esa época. 

Al fin y al cabo, su magnífica obra retrata la vida de las mujeres en la posguerra, sus frustraciones, sus sueños y sus luchas por la autonomía, incluso en un contexto social adverso. Y sin etiquetas. Carmen Martín Gaite falleció en Madrid el 23 de julio del año 2000.

Por ambas escritoras, por todas las mujeres de sus libros y por todas las lectoras a las que dieron luz, esperanza, risas, llanto y un camino por el que seguir, hoy dejamos aquí nuestro pequeño homenaje.